sábado, 26 de noviembre de 2016

el 5 en la nba

Esta semana he tenido la suerte de ver el partido en el que los Sixers de Embiid recibían a los Heat de Whiteside y disfruté de un encuentro competido en el que los hombres grandes se hacían mayores y todo me parecía más normal porqué entiendo que los nuevos conceptos baloncestísticos que nos llegan desde la bahía de Oakland tienen mucho que ver, en lo que al juego de ataque se refiere, con la espacialidad (amplío el área de juego y consigo más espacio dónde poder potenciar las cualidades de los míos) pero añoro aquellos tiempos en los que había un gigante que bailaba ballet en las cercanías del aro.

Fuente: thesixersense.com
Resulta que coincidió el partido con un máximo de anotación de Hassan, un chico del que jamás intuí una marca superior a la treintena de puntos, pero resulta que su equipo llegaba con dudas y necesitaba agarrarse a él en un día en el que iban a cruzarse con una dupla de cincos rivales a los que los puntos se les caen de las manos y había que hacerles sudar detrás y ahí las soluciones rápidas y las facultades convinativas de sus compañeros exteriores lograron un juego bello y a la vez distinto de lo que se viene dando con los últimos grandes que llegan a la liga porqué hasta Embiid gusta de encarar a su par en ataque y ganar por velocidad y queda muy poco al margen de Okafor capaz de desarrollar un juego ofensivo tan de cinco clásico y llevarlo más allá en lo que a la anotación respecta.

Está claro que si un entrenador tiene un siete pies atlético lo querrá utilizar cuan baluarte defensivo dado el potencial intimidatorio que posee un elemento así. Si encima es rápido de reflejos y se equilibra bien en sus movimientos laterales y giros rápidos, tendré un taponador/reboteador de primer nivel y eso se cotiza al alza, pero ver coger la posición ahí abajo, proteger la pelota, generarse un espacio dónde solo hay músculos, huesos y tensión, y terminar rompiendo por velocidad, imaginación y técnica siempre será más bello para mi.

Así que sí, que Towns es cojonudo y Porzingis también porqué son gigantes que juegan como exteriores y tienen un rango de tiro de la leche pero a mi me mola más ver fajarse a Hernangómez y no tiene nada que ver con que sea español. El chaval se lo curra y hasta tiene que decir que ya no volverá a disculparse a un rival caído y mucho menos ayudarle a levantarse porqué Jennings ya le ha explicado que cuando estamos ahí, estamos en guerra, amigo.

Love you all ;)

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